Hace algunos meses ya, (diría yo, tal vez, años) en los pasillos de la Facultad de Filosofía y Letras encontré un anuncio: "VENDO EL MUNDO COMO REPRESENTACIÓN", decía ...Justo ahora me gustaría saber si tal cosa está aún ofertada. Cualquier información, a mi correo.

de koalas y la Bishop

Cuando pasé por casa de Edgar O. Avilés [aquí a su derecha, en Odiseo sabía que/] encontré una selección muy muy afortunada: Pound, Bishop, Pizarnik. Nuestro Edgar está leyendo más poesía, (¿acaso más pornografía?). Mi muy estimado Edgar, ya no se junte con los poetas, están haciendo de usted un monstruo. ¿Qué? ¿Estará mañana en la lectura del buen Jorge Solís, Daniel Saldaña y la bella Villedita? ...Es usted un caso perdido.
(Usted también Carrera, ya no ande contestando mis llamadas a media madrugada).

Lugares

Siempre pensé y concebí una revista dirigida hacia un lugar (dos lugares) muy en específico: la literatura y la filosofía. Hace más de dos años pensaba yo en el proyecto y en su probable concepto (no pensaba en costos, así yo de cándida [qué palabra tan retelinda]). Y hace un año y medio, luego de varias pláticas con tan preciso maestro y brillante editor; y luego de largos desvelos leyendo a mi colega y amigo Fred Roberts, decidí un probable formato, número de páginas, tipo de papel, posibles autores y posibles lugares y ensayos (todos los posibles ahora ya, seguros, ciertos e impresos). En ese entonces decidimos que las dos primeras colaboraciones de Fred serían en torno a nuestros amores secretos: Cage y Tucholsky. También tenía contemplado, por supuesto, que en las páginas estaría el brillante pensamiento de la excelentísima Greta Rivara, de Paula Bianchi y el muy estimado Alberto Constante.
Todo fue tomando su conducto, y la profesional y precisa labor de Sergio Santiago Madariaga proporcionó el último e inigualable punto vital para entonces zarpar [lugar tan común de palabra entre los que somos cabeza de algún proyecto, pero en mi caso, es conveniente porque la revista se llama Arca y mi justificación es necia].
Pienso ahora que todo lo que está sucediendo alrededor de esta Arca y sus habitantes es justo y necesario. Nos felicito (querido Neri, no sé qué me recordó). Bien, será entonces que, felicito a mis colegas, en especial a Fred Roberts, quien (en esfuerzo colectivo) obtuvo el Loebner Prize 2008 de inteligencia artificial por su Elbot. Un abrazo muy fuerte amigo, my kind regards.
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Isn't he cute?
(Entre esta belleza y clamar a los siete fantásticos pues no sé hacia dónde queridos... ¿qué hacemos chicos?)
Esta casa tiene la altura perfecta. Es fría. Por las noches, se escucha en ambas ventanas de la habitación arriba, la lluvia. Es perfecta. Ya instalé, por supuesto, la cafetera, el teléfono, mi cajón con Bach, Gorecki, Mahler, Brahms, Ponce, Stravinsky, la Peyroux (a quien escucho ahora!) etc. Estoy en una ciudad perdida, un lugar lejos de la mano del caos. Todo menos caos. Eso sí, el polvo me acompaña cada tercer día, todo se empolva demasiado rápido. Tengo dos grandes sillones donde mis queridos amigos que escriben, que editan, que cosen, que construyen, que pintan, que le hacen al cabaret, pueden, sin duda, quedarse los fines de semana. ¿Y entre semana? Ah! También. El sábado haremos llegar nuestros libros (míos, de Annie, Andreita, Sofía y Marianita). Voy por un café, también debo imprimir los exámenes para mis convenciones como docente. Por cierto, Sergio, nos debemos un expresso o capuchino. ¿La próxima semana?

"Soy amiga de la flor que baila con la brisa"




Chicos, uno de ustedes olvidó una joyita kitsch en nuestro buen Rod... Benditos sean, les agradezco!! He pasado una tarde de lo más linda, cielo rojo, cielo gris, cielo negro y bellas letras de bellas canciones. Prometo que en mi próximo libro, intitulado fANtasía Camp/Sayulita kitsch, habrá una dedicatoria para todos los que son ustedes.